
Branding
Si quieres evitar ser uno más en la lista de “¿y eso qué era?”, o si quieres mejorar tu comunicación, crecer tu audiencia y vender o compartir más lo que haces, entonces el branding es tu punto de partida. Sin él, es como querer hacer una tortilla sin batir los huevos... y ya sabes cómo acaba eso.
¿Cómo impacta el branding en tu proyecto?
¿Cómo interactúas con tu mercado, cómo te diferencias, por qué la gente te reconoce? ¿No lo sabes? Pues ahí es donde entra el branding. Un buen branding te permite contar quién eres, qué haces y por qué lo haces de una forma clara, coherente y memorable. En el caso de un proyecto artístico o cultural, esto es aún más importante, porque no solo vendes un producto o servicio, sino que compartes una visión, una sensibilidad, una manera de ver el mundo.
Ok pero: ¿Qué incluye?
Cada proyecto es un mundo, pero básicamente el branding incluye dentro 3 procesos clave:
Estrategia
La estrategia es donde analizamos qué haces, por qué lo haces, para quién, con qué valores y con qué objetivos. Aquí definimos la personalidad de tu marca, su propuesta de valor, su posicionamiento y la manera en que se relaciona con su entorno.
Identidad visual y narrativa
Diseñamos una identidad visual coherente con lo que definimos en la estrategia: logotipo, paleta de colores, tipografías, elementos gráficos, composiciones, narrativa, storytelling y todo lo necesario para que tu marca se vea y se escuche como merece. Nada de plantillas genéricas ni diseños “de moda”: lo tuyo será único, reconocible y con intención.
Activación
La activación es el momento en el que empezamos a aplicar todo lo creado: definimos juntos el lanzamiento, preparamos los canales de comunicación y nos aseguramos de que cada rincón donde aparezcas respire la identidad que construimos. Es cuando todo lo que antes estaba en el papel (o en una presentación bonita) empieza a tener impacto real. Y créenos: cuando todo está bien pensado, se nota. Y mucho.
Beneficios del branding
Conexiones auténticas
El branding te ayuda a construir una identidad que conecte con tu público, que hable su lenguaje y que refleje tu esencia sin necesidad de explicar demasiado. Hace que tu cartel, tu web y tus redes tengan coherencia entre sí, transmitan profesionalidad y generen confianza.
Acceso a oportunidades
Cuando un proyecto artístico-cultural tiene una identidad bien trabajada, es mucho más fácil acceder a colaboraciones, subvenciones, espacios y oportunidades: la gente sabe quién eres, qué representas y qué pueden esperar de ti. Y en un sector tan repleto de proyectos, eso marca la diferencia.
Claridad estratégica
El branding no solo te da una imagen bonita, también te ayuda a organizar tus ideas, definir tu mensaje y tomar decisiones con más claridad. Saber quién eres, qué ofreces y cómo lo comunicas te ahorra tiempo, discusiones innecesarias y cambios de última hora porque “no lo teníamos claro”.
¿Es para ti?
Si tienes un proyecto artístico, cultural o creativo que necesita tomar forma, hacerse visible o simplemente dejar de parecer un experimento universitario eterno… sí, esto es para ti.
-
Cuando empiezas de cero y quieres construir tu identidad con fundamentos sólidos.
-
Cuando tu proyecto ya existe pero necesita una transformación profunda porque lo que hay no está comunicando lo que se necesita.
-
Cuando no quieres cambiar del todo, pero sí actualizar y ordenar un poco la casa.
Preguntas frecuentes
(más de lo que piensas).
-
Trabajando con nosotros, podrás crear o actualizar tu sistema de comunicación para llegar, de una vez por todas, a una audiencia cualificada que interactúe con tu proyecto, compre tus productos o servicios y entienda el valor real que aportas.
Vamos, que dejarás de hablarle al vacío de Internet y empezarás a conectar con personas que sí te escuchan… y que además están dispuestas a pagar por lo que haces (lo cual siempre viene bien, ¿no?). -
Cada proyecto es un mundo. Según los servicios que necesites, las tarifas pueden variar. No trabajamos gratis (ni vivimos del aire, aunque a veces lo intentamos), pero en algunos casos estamos abiertos a comenzar con inversiones pequeñas si la situación lo requiere.
Lo mejor que puedes hacer para saber por dónde empezar esreservar una reunión con nosotros, contarnos tu historia, tus necesidades y cómo está el patio. A partir de ahí, vemos juntos qué podemos construir.
-
Como ya hemos dicho, cada proyecto es único y especial. El tiempo que tardemos dependerá completamente de tus necesidades… y de si nos mandas los textos a tiempo, claro. No hacemos magia (todavía), pero sí nos adaptamos a lo que tu proyecto requiera para que todo salga lo mejor posible y sin prisas innecesarias (aunque algún café extra caerá, seguro).
-
Básicamente, no. No queremos darte más trabajo (bastante tienes ya). Sabemos que vas de aquí para allá y que tu agenda parece un tetris, así que solo necesitaremos un par de reuniones de 30 minutos para entender bien tu proyecto y ponernos manos a la obra con lo que mejor sabemos hacer. Tú te relajas, nosotros curramos. Trato justo, ¿no?
-
Si este es tu caso, reserva una reunión y cuéntanos tu situación. Sabemos que a veces el bolsillo aprieta (créenos, lo entendemos). Si vemos que tiene sentido y que podemos construir algo juntos, podemos valorar opciones como pagar más adelante, en plazos o buscar una fórmula que no te deje viviendo a base de arroz con sal. Aquí lo importante es que el proyecto avance.
-
Depende… estamos abiertos a casi cualquier propuesta, siempre que nos dejes un poquito de espacio para ser creativos y hacer magia. Si el encargo consiste en hacer algo aburrido, gris y sin alma… probablemente no sea para nosotros (o al menos necesitaremos muchos cafés). Pero si nos das libertad para aportar ideas, explorar caminos artísticos y darle personalidad al proyecto, entonces cuenta con nosotros. Prometemos no ponerle neón a todo... a menos que nos lo pidas, claro (quizás si lo pides tampoco).
-
¡Pues no, la verdad! Créenos cuando te decimos que esto puede jugar en contra de tu proyecto. Tener solo un logo sin una estrategia de marca ni elementos como tipografía, paleta de colores, tono o estilo visual, es como tener un DNI con tu foto pero sin nombre, ni fecha, ni nada. Vamos, que nadie sabría quién eres ni por qué deberían confiar en ti. El logo es solo la punta del iceberg… y debajo hay todo un universo que hace que tu identidad funcione de verdad.
-
Para poder trabajar contigo como es debido, necesitaremos acceso a información sobre tu proyecto o empresa. Tranquilo, no es para cotillear —es simplemente para ayudarte a definir una buena estrategia y diseñar con sentido. Cuanta más información tengamos, mejor podremos hacer nuestro trabajo (no somos adivinos… aunque a veces lo parezca). Todo lo que compartas estará protegido por contrato, así que tus secretos estarán más seguros que la contraseña del WiFi de tu vecina.